Entrevistas de trabajo, presentaciones en público… Todos, en algún momento de nuestra vida nos enfrentamos a situaciones de gran presión en las que sentimos que nuestra ansiedad se dispara.
Pero la ansiedad no tiene por qué ser necesariamente perjudicial. Si aprendes como responder ante estos episodios, podrás incluso utilizarla para mejorar tu desempeño.
La ansiedad te mantiene a salvo
La ansiedad es una emoción saludable y normal. Su objetivo es alertarte del peligro para que puedas mantenerte a salvo.Cuando estamos ante algún peligro la ansiedad desencadena una reacción fisiológica. Aceleración del ritmo cardiaco, sudor en las palmas de las manos, y tensión muscular son algunos de los síntomas que sentimos. Estímulos cuyo objetivo es animarnos a actuar para sobrevivir.
En el mundo moderno, la mayoría de las situaciones que nos producen ansiedad no suponen una amenaza para nuestra vida; pedir un aumento de sueldo o lanzar un negocio nuevo no te matarán. Aun así, las alarmas de tu cuerpo reaccionan a estos eventos como si realmente constituyeran una amenaza de muerte. La forma en que gestionas estas respuestas fisiológicas determinará si tu ansiedad supone una ventaja o una amenaza para ti.
La ansiedad como un obstáculo
Habitualmente, a los atletas se les recomienda liberarse de sus miedos y a los artistas a reducir su pánico escénico, y es por una buena razón, algunos estudios han encontrado que la ansiedad afecta a la memoria y reduce la concentración.
Pero en realidad esto no tiene por qué ser así. De hecho, la ansiedad puede mejorar tu rendimiento.Un estudio de 2017 examinaba la forma en que diferentes individuos se enfrentaban a diversas situaciones. Se descubrió que aquellas personas que asumen los eventos estresantes como desafíos, en lugar de como amenazas, son capaces de obtener energía de su ansiedad, mejorando así su desempeño.Los individuos que reconocieron su ansiedad, en lugar de reprimirla obtuvieron mejores resultados. Aquellos que intentaron fingir que no se sentían ansiosos o aquellos que temían que la ansiedad les hiciera daño, tuvieron un peor rendimiento.
Los investigadores concluyeron que aquellos individuos que reconocieron sus emociones y aceptaron su ansiedad fueron capaces de dedicar energía a sus objetivos, en lugar de gastarla tratando de superar la ansiedad.
Convierte tu ansiedad en una ventaja competitiva
Cuando sientes ansiedad tienes dos opciones sobre como gestionar esa energía, puedes reprimirla o aceptarla. Aceptándola serás capaz de aplicarla a aquello que estés realizando.Puedes tener éxito cuando te sientas ansioso siempre y cuando estés abierto a la idea de que estar nervioso puede mejorar tu rendimiento. Si piensas que la ansiedad te va a frenar, lo más probable es que así sea.
Cada vez que te enfrentes a un estado de ansiedad irás creando músculo mental y empezarás a ganar confianza en ti mismo. A medida que desarrolles tu habilidad para tolerar la ansiedad, lo más probable es que empieces a ver el stress como un desafío, en lugar de como una amenaza.
Cuando es necesario buscar ayuda profesional Si la ansiedad interfiere en tu vida, si hace que sea difícil trabajar, ir a clase o relacionarte con otros, busca ayuda profesional. La terapia cognitiva conductual puede ser un tratamiento muy efectivo.Fuente: inc.com